Los orígenes del antiguo Egipto han permanecido envueltos en el misterio desde hace siglos. Recientemente, una nueva generación de arqueólogos ha recorrido el desierto examinando templos y tumbas, excavando ciudades perdidas e investigando con profundidad los restos de la civilización egipcia.
En este documental retrocedemos miles de años para descubrir cómo emergió esta poderosa civilización. También analizamos el papel desempeñado por el faraón en el conflicto entre el orden divino y las fuerzas del caos.
Misterios, Soldados Fantasma que hacen guardia ….. Pero adentremosnos en este misterio y PROHIBIDO tunel del peñon de Gibraltar de la mano de Planeta Enigmatico y Pepe Marin …
Cada cierto tiempo Gibraltar se convierte en el protagonista de la actualidad tanto de España como de Reino Unido, países que se disputan la soberanía de este peñón (actualmente del segundo) situado en el sur de la Península Ibérica. El empeño que ambas naciones han puesto sobre este terreno de 6,8 km² a lo largo de los últimos tres siglos ha sido la importancia estratégica que tiene su localización, comunicando el mar Mediterráneo y el océano Atlántico. Pero dejando a un lado el conflicto diplomático que hay abierto, intensificado en los últimos días y que seguro ya sabe, animo a conocer algo más de este lugar. Y es que Gibraltar no es solo roca, sino que bajo su peñón oculta una peculiaridad insospechada: 52 kilómetros de túneles secretos. Y seguro que se pregunta, ¿por qué y desde cuándo?
Todo se debe a la pretensión de España de recuperar Gibraltar, tras serle arrebatada por Gran Bretaña en agosto de 1704 en el contexto de la Guerra de Sucesión (1701-1713). Así, el primer intento fallido de rescatar Gibraltar se produjo meses después, en diciembre de ese mismo año. Primer intento, pero no el último. Después de que se firmara el Tratado de Utrecht en 1713 (en el que Gran Bretaña reconoce a Felipe V como rey de España a cambio de la cesión de Menorca y Gibraltar) nuestro país volvió a pretender recuperar Gibraltar. Esta segunda ocasión fue más larga y dura (entre 1779 y 1783), tal es así que fue conocida como El Gran Asedio. Y fue en esta ocasión, cuando el gobernador de Gibraltar, el general Elliott, mando construir al sargento mayor Ince, a quien se le ocurrió la idea, un túnel para llegar a la cara norte del peñón gibraltareño, donde se encuentra una plataforma que permitía disparar con cañones al ejército español. Tras tres años de excavar en la piedra caliza del peñón utilizando cargas de pólvora, martillos, cinceles y palas, los túneles estuvieron listos. Y España fue de nuevo derrotada.
En 1830 Gibraltar recibió el estatus de colonia británica, y las pretensiones de nuestro país por recuperarlo fueron disminuyendo. Hasta que el Peñón se volvió a sentir amenazado en el siglo XX, pero esta vez no por sus vecinos, los españoles, sino por un enemigo más lejano e inesperado: Hitler.
Así, durante la Segunda Guerra Mundial se aprovecharon estos túneles, se rehabilitaron y ampliaron. La entrada de Gran Bretaña en esta guerra supuso que Gibraltar se convirtiera en un punto clave para los aliados como escala y punto de aprovisionamiento. De este modo, entre 1940 y el final de la guerra, la red de túneles llegó hasta los 52 kilómetros de carretera(más que en el exterior), diseñados en zig zag con el objetivo de disminuir el efecto de las ondas expansivas en caso de que se lanzasen bombas.
Actualmente estos túneles se encuentran en situación de desuso (salvo algunas zonas convertidas en museo), pero numerosas fotografías de la Segunda Guerra Mundial nos muestran un laberinto subterráneo donde se podían encontrar almacenes de armamento, un hospital con quirófanos de campaña, cocinas, comedores e incluso una central eléctrica para asegurar el abastecimiento energético a Gibraltar, en caso de un bombardeo. Para terminar una curiosidad más: se dice que en una de las salas, en la conocida como Sala de San Jorge, el diplomático y oficial de la Royal Navy, Lord Napier, ofreció un banquete al General Ulysses S. Grant, 18º Presidente de Estados Unidos.
En Madrid podemos encontrar una curiosidad histórica en pleno centro y que nos transporta a tan solo unos años atrás, pero que aun así supone un atractivo para los amantes de lo antiguo. Se trata de la estación abandonada de Chamberí.
Empecemos desde el principio. El metro de Madrid fue inagurado el 17 de octubre de 1919, siendo el Rey Alfonso XIII el primer viajero, convirtiendo a la ciudad madrileña en la quinta capital europea en contar con este servicio de transporte después de Londres (la primera ciudad del mundo en tener una línea del metro), Budapest, París y Berlín. La primera línea, que unía el barrio de Cuatro Caminos con la Puerta del Sol, contaba con seis paradas intermedias: Ríos Rosas, Martínez Campos, Chamberí (la que nos ocupa ahora), Glorieta de Bilbao, Hospicio (actual parada de Tribunal) y Red de San Luis (actual Gran Vía).
¿Pero por qué fue cerrada la estación de Chamberí? La explicación es la siguiente: en los años 60, Madrid empieza a crecer y a recibir cada vez más españoles procedentes de las zonas rurales y de otras ciudades. El incremento del tráfico de viajeros obligó al ayuntamiento de Madrid a introducir nuevos coches de metro con una mayor capacidad, de hasta seis coches (pasando de los 60 metros originales a 90 metros de longitud). Esto obligó a ampliar las estaciones de metro de la línea 1 para que los nuevos trenes, de una mayor capacidad de usuarios, pudieran parar de tal forma que todos los viajeros consiguiesen entrar y bajar. El problema llegó en la estación de Chamberí, que fue imposible de ampliar por su forma curva y su proximidad con las estaciones de Bilbao e Iglesia. De este modo, el Ministerio de Obras Públicas decidió cerrarla el 22 de mayo de 1966.
Tras su cierre, la parada Chamberí fue abandonada. Pero los trenes seguían pasando por la estación sin pararse en ella, de tal forma que los viajeros curiosos que miraban a través de la ventana observaban que tras el cristal podían ver la estación como si se tratase de un reflejo del pasado, hecho que hizo que fuese conocida entre los pasajeros como `la Estación Fantasma`. Como curiosidad, cabe añadir que esta parada fue uno de los escenarios del rodaje de la película “Barrio” (1998), de Fernando León de Aranoa, secuencia que puedes ver en el interior del blog Planeta Enigmatico, asi como el video del interior de la estacion Fantasma.
En 2006, la Estación de Chamberí fue rehabilitada y restaurada, respetando el espíritu de cuando fue abandonada, desde el mobiliario hasta los carteles de publicidad, para convertirse en un museo que actualmente se puede visitar.
Una de las parejas reales más controvertidas de la historia de Egipto es la formada por Akenatón –el faraón hereje– y su esposa Nefertiti. Las imágenes conservadas de la reina Nefertiti nos muestran a una mujer muy hermosa que, además, rompió el protocolo faraónico para gobernar al lado de su esposo.
Las tecnologías más modernas y los hallazgos recientes han permitido a la arqueóloga Joan Fletcher avanzar en sus investigaciones sobre la que podría ser la momia de la reina Nefertiti. Una mujer-faraón eternamente polémica cuya figura y leyenda no han dejado de fascinar a los amantes del Antiguo Egipto.
Este programa especial se sirve de las tecnologías forenses más avanzadas, incluidas pruebas de ADN, para intentar revelar la verdadera identidad de la momia de Hatshepsut.
Madrileño de nacimiento, sus años de infancia los pasó en Collado Villalba. Se licenció en Medicina y Cirugía en la especialidad de Psiquiatría, siendo alumno aventajado del Dr. Juan José López Ibor. Desde entonces trabajó en distintas clínicas, no abandonando jamás la práctica profesional de la psiquiatría.
Su primer contacto con el medio televisivo llegaría en 1967 al colaborar con Narciso Ibáñez Serrador como guionista en algunos capítulos de la serie Historias para no dormir de TVE; en uno de los cuales, titulado El regreso, hizo una breve intervención como actor. A partir de 1974 comenzaría su popularidad cuando es fichado para llevar una pequeña sección dentro del programa Todo es posible en domingo, hablando de enigmas y misterios.
En 1976 se le ofrece la oportunidad de dirigir y presentar Más Allá, su propio espacio en la televisión pública, que estuvo en antena hasta 1982, con altas cotas de audiencia. Precisamente gracias a este programa iniciaría viajes por distintas partes del mundo con vistas a la grabación de reportajes, especialmente a Egipto, México y Perú.
Entre 1982 y 1984 su espacio pasó a denominarse La Puerta del Misterio, dentro del cual, aparte de los programas grabados en estudio, albergó dos series de documentales realizados y presentados por él: El otro Perú -rodado en el país andino y dedicado a su rico patrimonio arqueológico precolombino- y Ellos -dedicado al fenómeno OVNI, con testimonios de testigos de toda condición social, incluyendo pilotos y militares-.
En años posteriores colaboraría en otros programas de TVE, como Punto de encuentro, y realizaría la serie La España mágica.
En 1989 vendrían dos nuevas series documentales, El imperio del sol1 y El otro México,2 esta vez para las televisiones autonómicas; dedicadas, respectivamente, a las culturas precolombinas peruanas y mesoamericanas. Esta labor de divulgación le valdrían recibir sendas distinciones oficiales de Perú y México.
También ese año rodaría otra serie, En busca del misterio, en compañía del periodista y escritor Juan José Benítez, recorriendo el continente americano y la Isla de Pascua.
Años después vendrían programas de debate sobre misterios en televisiones locales (Misterios en la intimidad, 1995-1996) y autonómicas (La otra realidad, 1999-2000). Finalmente realizaría Viaje a lo desconocido, su única serie de documentales que quedaría inédita en televisión, apareciendo en DVD, cuyo rodaje le llevaría por Europa, América Latina, Jerusalén y Pakistán.